Head-Full-Of-Wonder

Críticas Discos

Jason Collett firma un disco balsámico y otoñal que suena a otra época, a positivismo, a luz en la oscuridad. Artesanía sencilla y bella.

Parece que el Otoño no nos quiera visitar. Se nos hace extraño haber disfrutado de las castañas, boniatos y panellets en manga corta. No hagan caso a los Trumpistas! Estamos ante tiempos climáticos convulsos que vinieron para quedarse y dejarnos sin estaciones, sin cambio de armario, sin bolsa de agua caliente!. Tampoco había un cambio de tendencia musical obvia. No me había topado con discos otoñales hasta «Rolling Golden Holy» de hace unas semanas, los recién llegados de Herman Dune y Scott Avett, y lo que está por llegar… esa joya de esencia «chrisbelliana» que está presente en «Castell de Pop» de Baby Scream.

En realidad, y a pesar del bonito disco de Bonny Light Horseman, considero que el pistoletazo de salida de «mi» otoño musical lo marca el canadiense Jason Collett con una colección de canciones bonicas del to, de esas de «pure & easy», delicadas y reconfortantes. Collett es un artesano y siempre es un placer y un gozo escuchar sus canciones. No tiene disco malo aunque mis favoritos sean «Rat a tat tat» de 2010 y «Songs of a dance man» de 2016, su último disco de estudio, aunque el año pasado nos sirvió un «Best Of» más que recomendable.

Jason Collett firma un disco balsámico y otoñal que suena a otra época, a positivismo, a luz en la oscuridad. Artesanía sencilla y bella

«Head Full of Wonder» es su nuevo artefacto sonoro. Una docena de canciones otoñales. Sencillas y bellas. Artesanales. Bonicas del to. Todo bien producido por Marcus Paquin y bien interpretado y musicado por Joe Grass a la guitarra, Liam O’Neill a la batería y Mike O’Brien al bajo. Siempre bajo el liderazgo absoluto de un Jason Collett que se muestra inspiradísimo bebiendo del supersonido de los 70s. Maravillándonos y cuidándonos. Disco balsámico sin duda que rescata ese regusto a épocas pasadas. Una pequeña joya anti-modas que aporta luz en la penumbra.

La maravillosa «Dark Times» abre el disco marcando su estilo y forma. Una preciosa tonada basada en un poema de Bertolt Brecht en la que deja entrar un haz de luz, un optimismo necesario en tiempos difíciles y oscuros. Si hablamos de «Everyday sunflower»… buff!… que cosa más bonica! qué delicadeza, qué groove, qué coros más deliciosos! Y qué me decís de esa «Milk & Honey», esos metales.. Sin duda una de mis favoritas de todo el lote.

El disco está repleto de momentos absolutamente geniales y placenteros, muchos de ellos de esos que me gusta catalogar como «pure and easy» como la balada countril «Just before the rain» que con poco nos los da todo. «Hot Mess» es fabulosa, lo mismo que «Have some fun», pegadiza, alegre y muy radiofónica. Un single en potencia. «Silver dollar moon» es puro Collett. Resume en ella la manera de componer del canadiense. Una maravilla más.

La última parte del disco comienza con el single «Right on woman» que es un temazo de tomo y lomo. Y a partir de aquí se va recogiendo para cerrar una artefacto sonoro espectacular. La melancólica «Closer to the truth» da paso al pop de «Come on sun» que con las escuchas me da la sensación de ser uno de los grandes temas del disco. «Up the river» es un despelote de otra época y cierra maravillosamente con otra joya, con «Sweet water sea», también a bajas revoluciones, con un poso otoñal de lujo.

Jason Collett – Head Full of Wonder (2022)

Jason Collett firma un disco balsámico y otoñal que suena a otra época, a positivismo, a luz en la oscuridad. Artesanía sencilla y bella

01.- Dark Times/ 02.- Everyday Sunflower/ 03.- Milk & Honey/ 04.- Just Before The Rain/ 05.- Hot Mess/ 06.- Have Some Fun/ 07.- Silver Dollar Moon/ 08.- Right On Woman/ 09.- Closer To The Truth/ 10.- Come On Sun/ 11.- Up The River/ 12.- Sweet Water Sea


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