Con Llobarros + Juan y la Hormiga + Rhyan Paul en el Botànic de Cullera (crónica conciertos 5-10-2025)

7 de octubre de 2025
Autor: Juanjo Mestre.

Crónica de los conciertos de Llobarros más Juan y la Hormiga y la expo de Rhyan Paul en Botànic de Cullera el 5 de octubre de 2025.

Esta vez sí pudo celebrarse el inicio de la temporada ‘Musiques i arts al Botànic de Cullera 2025’ tras el parón veraniego y la suspensión hace quince días por motivos metereológicos en ese idílico lugar ubicado en la comarca valenciana de la Ribera Baja.

No faltó la oportuna mezcla de disciplinas artísticas, culturales y musicales a las que nos tienen acostumbrados entre la impresionante diversidad de plantas y la rica vida silvestre que existe. Por eso, para empezar tuvo lugar la Exposición «Valencia Rocks! a cargo del prestigioso fotógrafo británico Rhyan Paul, que nos deleitó con un montón de imágenes de conciertos y de la escena underground valenciana, todo acordes resonantes en sus instantáneas, con nombres como Marky Ramone, Chrissie Hynde… y muchos héroes locales.

A continuación, el dúo Juan y La Hormiga, formado por Juan Pablo Mazzola y Maria Mathe, estrenaron canciones del que ya podemos confirmar es un excelente álbum de título «València» que muy próximamente va a formar parte de nuestro catálogo de Exile Records, algunas hemos anticipado aquí como las deliciosas «After the War” y “Cupid’s Arrow”, además de versiones llevadas a su terreno, como de los Faces, Del Shannon, Everly Brothers, Baby Scream, Ritchie Valens, Harry Nilsson, Los Gatos o Big Star.

Tras ese aire melancólico en las melodías del dúo argentino llegó el turno del nervio y de la energía más exótica, a cargo del trío valenciano Llobarros, formado por Pep Ahuir a la guitarra, Rubén Marques al bajo y David Vina a la batería, que nos proporcionaron un divertidísimo espectáculo de surf garagero instrumental lleno de sonidos onomatopéyicos, entre influencias de Link Wray, Duane Eddy, Dick Dale, The Surfaris, The Ventures, The Sonics…, culminando David como arzobispo del evento en una transgresora eucaristía dominical entre los privilegiados asistentes.

Para rematar, la «germanor», con paella valenciana colectiva de chuparse los dedos, como manda la tradición de la terreta, para todas y todos los músicos, artistas y concurrencia.