Por fin aparece el disco perdido de Neil Young.
¿Es una joya que hace justicia al resto de los discos que Young grabó en la década de los setenta, o es un nuevo proyecto más orientado al negocio?
La versión ‘oficial’ que dio Neil Young sobre la no publicación en su día de «Homegrown» es que se trata de un disco cimentado sobre una ruptura y que resultaba demasiado doloroso y personal, motivo por el cual quedó encerrado en un cajón hasta este 2020.
No seré yo el blasfemo que ponga en duda la palabra del Señor, pero creo que podría haber otros motivos además del expuesto en su día. No menos personal y doloroso es «Tonight’s the night», que fue el disco que fue publicado en el orden cronológico que hubiese correspondido a este «Homegrown».
De cualquier manera y tras lustros de fantasear con la supuesta maravilla que Neil nos estaba privando de degustar, finalmente es publicado el disco perdido de Neil Young, «Homegrown» en este extraño 2020 en lugar de en 1975, año de su creación.
Todos sabemos que alguna de las canciones aquí contenidas fueron grabadas por Neil en algunos discos dispersos en el tiempo: En «American stars ‘n’ bars» (1976) encontrábamos «Star of Bethlehem» y «Homegrown»; en «Decade», «Love is a rose» y de nuevo «Star of Bethlehem»; en «Hawks and doves», «Little wind» y en «Ragged Glory», «White line».
Algunas canciones ya han sido interpretadas por Neil en vivo y así aparecen en algunos bootlegs, como «Separate ways», «Try», «Kansas»… en definitiva, que tan novedoso al final tampoco ha resultado.
Por supuesto que todas las canciones citadas fueron revisitadas para la grabación o actuación en vivo correspondiente, y así las hemos conocido durante décadas y no es hasta ahora cuando escuchamos las grabaciones primigenias, tal y como fueron alumbradas en un primer momento.
La pregunta es la siguiente: ¿Es una joya que hace justicia al resto de los discos que Young grabó en la década de los setenta, o es un nuevo proyecto más orientado al negocio?.
Yo estoy más cerca de la segunda cuestión que de la primera, y no me gusta decirlo, pero creo que «Homegrown», aunque tiene algún momento ciertamente brillante, prerrogativa de la grandeza del autor de «Harvest», el conjunto es una especie de montaña rusa, donde hay momentos que son auténticas medianías y algunos que directamente sobran, el recitativo con ruidos molestos titulado «Florida» es un ejemplo evidente de lo que digo.
No es el equilibrio lo que brilla en «Homegrown» y aunque la esencia es principalmente folk, con acústicas y letanías campestres, no veo mucha competencia en este campo con respecto a «Harvest» (1972) o «Comes a time» (1978).
Incluso diría que lo mejor de este disco perdido es lo que ya conocíamos, pasando el resto de los cortes a un segundo plano, incluidos los momentos más eléctricos como «Vacancy», que no aporta gran cosa, y tres cuartos de lo mismo el blues «We don’t smoke it no more».
Página web de Neil Young: https://neilyoungarchives.com/
No diré que el disco sobra, el más grande no molesta nunca y la escucha de este disco no es una excepción, pero sí que mantengo la opinión de que no es una aportación especialmente destacada y que no hubiese pasado nada por mantener las canciones ya conocidas tal y como las hemos descubierto en otros trabajos, aunque me imagino que la leyenda levantada durante décadas a propósito de este archivo propiciará unos buenos dólares que el viejo Neil agradecerá.
- Concierto: The Stems – Santana 27- (Bilbao, 22/09/2024) - 24 de septiembre de 2024
- The Ribbons – ‘Neurotransmission’ (2024) - 23 de septiembre de 2024
- Concierto: The Psychedelic Furs – Kafe Antzokia (Bilbao 12/09/2024) - 13 de septiembre de 2024
estoy 100% de acuerdo no mata ni engorda pero deja buen sabor de boca
Lo has descrito a la perfección, gracias.
Saludos
¿Desde cuando a Neil Young no le ha gustado la tela?, no son pocos los testimonios (propios y ajenos, que lo cuenten sus amigos CSN cuando programaban sus reuniones y posteriores giras…)) que muestran al canadiense como un tipo especialmente amigo del dólar, incluso en la época Geffen, con discos nada comerciales, se beneficiaba de tener uno de los contratos discográficos más altos del planta rock. Y me parece de lo más normal, para qué engañarnos. Yo no vería tanto en la faceta de "proyecto orientado al negocio", todo lo es en definitiva. Más bien lo contemplo desde la perspectiva de colocar las canciones originales en su contexto y plataforma original, por mucho que una buena parte de esos temas ya hubieran sido "desplazadas" hacia otras obras.
Abrazos,