Supersuckers Bilbao

Conciertos

Anoche daba comienzo la gira española de Supersuckers en una jornada de lluvia y fútbol en Bilbao.

Daba comienzo la gira española de la insigne banda norteamericana Supersuckers en un Kafe Antzokia con menos visitantes de lo que es habitual debido, sin duda, al importante y trascendental partido de fútbol que el equipo de la ciudad disputaba en San Mamés (con triunfo final) con el objetivo de alcanzar la final de Copa.

Ajenos a las vicisitudes deportivas y a la copiosa lluvia que hacía de las suyas en el exterior, con diez minutos de retraso daba comienzo el show de Supersuckers.

El último disco en formato larga duración del grupo, «Play That Rock ‘n ‘Roll» (pinchar reseña), data de 2020, por lo cual la gira que ayer comenzaba y que les paseará por España y otros países europeos, no es precisamente un tour de presentación de aquél álbum.

Tocaba por lo tanto repasar viejas y menos viejas canciones de las firmadas por el grupo durante los más de treinta y cinco años de vida del mismo. Enfrentaba el compromiso junto al irreductible Eddie Spaghetti (bajo, voz) el impactante guitarrista ‘Metal’ Marty Chandler y un contundente baterista de pegada impenitente como Christopher Von Streicher ‘Chango’.

Los años pueden pasar para la ajada Gibson de ‘Metal’ Marty o para la juvenil impostura de un Eddie Spaghetti al que, por otra parte, se le ve en plena forma tras su enfermedad de hace unos años, pero el correr del reloj se detiene a la hora de analizar el poderío y actitud de la autobautizada por ellos mismos «La banda más grande de rock and roll del mundo».

Indómitos y febriles, con impetuosa actitud rockera, sin concesiones a la modernidad y con la testa alta, la voz firme y el pulso disparado, riffs, punteos, base rítmica desbocada y canciones que contagian la esencia pura e indescriptible del rock and roll. Supersuckers en estado puro, con pose gamberra, chulesca, adheridos al polvo del camino.

Durante hora y media dispararon canciones sin solución de continuidad, fusionando el final de una con el comienzo de la siguiente con un hilo eléctrico y distorsionado que mantenía la intensidad y el subidón. Eddie se entendía con el personal con su inglés de Tucson (Arizona) y no daba cuartelillo en lo referente a un setlist que obvió las intentonas countrys de hace unos años para ceñirse a rugidos guitarreros y bramidos.

Pudimos escuchar incendiarios pelotazos como «Rock ‘n ‘Roll Records (Ain’t Selling this Year)», «The Evil Powers of Rock ‘n ‘Roll», «Ain’t gonna Stop», «All the Time», «Dead Inside», «Rock Your Ass» o «Mudhead» entre otras, además de un tema nuevo cuyo título no retuve. También ‘Metal’ Marty tuvo su momento con tres temas de su histórico personal como «Working my Ass Off», «Goddamn Divorce» y la coreable «Idaho, Baby!».

Noche de rock and roll, de cowpunk, de empecinamiento ante el destino y de interminables carreteras hacia el ocaso. Como era de esperar, otra lluviosa pero gran noche de Rock and Roll.

Latest posts by Jorge García (see all)


Un comentario

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Artículos que te pueden interesar