The Steepwater Band

Conciertos

The Steepwater Band certificó junto a The Mothercrow la vigencia eterna del rock and roll en Vitoria/Gasteiz.

Acuñaron los gasteiztarras Potato en los años ochenta aquella frase célebre que rezaba: «En Vitoria Gasteiz, donde se hace la ley»… Anoche otro egregio grupo, en esta ocasión de Chicago, fueron los encargados de hacer cumplir la ley en la capital de Euskadi.

The Steepwater Band ofició de garantes de la ley no escrita del rock and roll desplegando sobre el escenario de HellDorado toda su autoridad a base de riffs fibrosos, intensos solos guitarreros, heroicos estribillos y vertiginosas exhibiciones rítmicas, todo ello reproducido con endiablada solvencia, irreductible actitud y en base a un rotundo repertorio extraído de su histórico musical (especialmente de sus últimos trabajos) más la incorporación de alguna versión.

The Mothercrow
The Mothercrow

Pero antes del terremoto, nos encontramos con The Mothercrow, reconozco que no conocía al grupo, pero resultó ser una más que agradable sorpresa. Me gustó su hard-rock hieráticamente insuflado por la flamígera guitarra de Max Eriksson y la voluptuosa vocalidad de Karen Asensio (que además jugaba en casa).

Lo mejor que se puede decir de un bolo como el de anoche de Mothercrow es que se hizo corto. Nos hizo entrar en calor con su energía eléctrica y la actitud y voz de una frontwoman a la antigua usanza, que mostró una voz de trazo terso sin olvidar la necesaria rotundidad que este estilo precisa. Temas que entraban como un cuchillo al rojo vivo en mantequilla y dejaban buen sabor a su paso. Siempre gusta descubrir grupos y a The Mothercrow habrá que hacerle un seguimiento.

The Steepwater Band en Helldorado
The Steepwater Band en Helldorado

Pero continuando con The Steepwater Band, poco más se puede añadir con respecto a lo dicho en el segundo párrafo de esta crónica. El público se lo pasó de miedo y la correspondencia de misivas musicales (y algo más) entre banda y parroquia fue total, hubo entrega por ambas partes y se disfrutó con absoluto frenesí de un setlist construido con piezas de los últimos álbumes de la banda «Turn on the Wheel» (2020) y «Re-Turn on the Wheel» (2022) como «Please the Believer», «Turn on the Wheel», «Shift», «Broken Spirit Blues», «Found», «Make it Right»

También cayeron algunas coplas de mi álbum favorito del grupo, «Clava»: «High and Humble» con intrépido solo de batería, la magnífica «Come on Down» o la estupenda «Remember the Taker». Temas sueltos de otros discos como «Shake your Faith» o «Revolution Sunday» junto a versiones perfectamente ajustadas al estilo pétreo y arenoso del grupo de clásicos de auténtica solera como «Positively 4th Street» de Bob Dylan y «Midnight Rambler» de The Rolling Stones.

Siempre es un lujazo pasar un par de horas con unos tipos como estos, que ofrecen una rica fricción rock, southern, blues y hard-rock de explosiva acción eléctrica, con dos guitarristas de campanillas: Jeff Massey y Eric Saylors repartiéndose los punteos, apoyados en el sonido detonante y burbujeante del bajo de Joe Bishop perfectamente acoplado al latido de los tambores de Joe Winters.

Suma y sigue con los magníficos The Steepwater Band, que como siempre ofrecieron una grandísima noche de Rock and Roll (junto a los estupendos The Mothercrow).

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