Especiales

Situarnos en el Londres de mediados de los sesenta es situarnos en el pistoletazo inicial de la época dorada de la música moderna. La «City» era un hervidero de alucinantes propuestas musicales, de nuevos sonidos, de nuevas y excitantes bandas. La escena londinense era como una buena escudella catalana, ya estaban los Beatles en el ambiente que aunque de Liverpool daban sabor al caldo pero igual de importantes que ellos eran ya los Stones, Kinks, Small Faces, Who, Yardbirds, Animals, etc, etc.. ya digo, eran tan necesarios unos como otros para que la receta llegara a ser tan exquisita. Los cuatro de Liverpool eran multiventas, los chicos de moda, los chicos buenos del vecindario, los que todos querrían como yernos y los que dominaban las listas, en respuesta a eso y de la mano del productor Andrew Loog Oldham aparecieron los Stones. Oldham creó su imagen y fue su manager y mentor desde 1963 a 1967, prácticamente la época de Brian Jones donde Oldham y Jones tuvieron sus más y sus menos pues el productor ninguneaba al bueno de Brian en favor de los Glimmer Twins. Al final ambos abandonaron a sus Satánicas Majestades, el príncipe rubio porque decidió bucear en su piscina puesto de drogas y alcohol para batir el record de inmersión, y el espabilado productor/cazatalentos por embarcarse en un proyecto personal con cierto riesgo, la creación de un sello discográfico que ahora catalogaríamos como indie a imagen y semajanza del creado por Mr. Spector en aquella época dejando a los Stones en manos de Allen Klein con el que no les fue nada mal visto lo visto.

IMMEDIATE RECORDS fue fundado oficialmente por Andrew Loog Oldham y Tony Calder en 1965 para definir lo que era el sonido de Londres, «The Sound of Swinging London», un mod-pop con alguna lisérgia blues-rockera donde encontrábamos bandas y artistas maravillosos como Nico, Les Fleur-de-Lys, Billy Nicholls, Chris Farlowe, The Mockingbirds, P.P. Arnold, The Poets, The McCoys, Amen Corner, The Nice, Humble Pie, Rod Stewart, Mike D’Abo, Twice As Much, John Mayall’s Bluesbreakers, The Aranbee Pop Symphony Orchestra, Golden Apples of the Sun, Masterminds, Barbara Lynn, The Australian Playboys, The Strangeloves, Fleetwood Mac, Nicky Scott, Tony Rivers and the Castaways, Duncan Browne, London Waits, and Mark Murphy…… pero sin duda su cabeza visible y banda de mayor éxito fue THE SMALL FACES. La banda formada por Steve Marriott, Ronnie Lane, Ian McLagan, y  Kenney Jones fueron sin duda la viva imagen del sello discográfico, ellos facturaron los mejores discos y también los que proporcionaron mayores beneficios, tres de sus discos están en el top ten del sello: Small Faces – Small Faces (1967), Small Faces – Ogden’s Nut Gone Flake y Small Faces – Autumn Stone, aunque existen otros que son simplemente maravillosos: Billy Nicholls – Would You Believe, Chris Farlowe – Out of Time, Duncan Browne – Give Me Take You, The Nice – The Nice, P.P. Arnold – The First Lady of Immediate, Amen Corner – If Paradise Was Half as Nice. La forma de trabajar del sello, de Oldham y Calder era caótica y desastrosa como se comenta en muchos artículos de la época, no supieron llevar todas las ideas a buen puerto ni tampoco asegurarse que los artistas fuesen fieles al sello. Cuando los Small Faces rompieron se camelaron a Marriott pero perdieron al resto, Humble Pie ganó mucho con ello y nosotros se lo agradecemos.
El sello discográfico cerró oficialmente en 1970 pero desde 1968 estaba moribundo, la causa? pues Apple Records de los Beatles que ocupó el nicho musical que debería haber ocupado Immediate. El sello pasó a manos de Brian Epstein para una de sus innumerables empresas, NEMS (y es que los tentáculos de los de Liverpool eran realmente descomunales), para luego ser adquiridos por el mítico CASTLE y a su vez acabar en la major Universal. En 1995 Oldham resucita IMMEDIATE y de todo ello salen innumerables reediciones, compilaciones, box.-sets…. donde otra vez los Small Faces se llevan la mejor parte. Sus reediciones son exquisitas aunque para resumir del todo aquel sello, aquel sonido y aquella época, no hay mejor compilación posible que «The Darlings of Wapping Wharf Launderette» de los Small Faces, compilación que además queríamos recomendaros, una auténtica muestra de la genialidad de las caritas, desde sus primeros singles, pasando por sus temas imprescindibles, todo el «Odgen’s» al completo y la evolución de Marriott hacia sonidos más Humblepieros. Excepcional es quedarse corto.

Para finalizar este especial del sello IMMEDIATE no puedo dejar de recordaros su tripleta de obras indispensables que todo amante de la música debería saberse al dedillo:

ODGEN’S NUT GONE FLAKE – SMALL FACES: la joya de la corona, ese disco que sobrepasa los límites conocidos de la genialidad y la belleza, un disco precursor de las grandes óperas-rock, un disco con la psicodélia del momento nacida después del Sargento Pimienta y su Club de los Corazones Solitarios, un disco increíble con la esencia mod, con lo que estaba por venir, con un Ronnie Lane en estado de gracia y un Marriott como bestia musical imparable. Joya absoluta que pudimos destripar hace tiempo en el Exilio y podéis volver a disfrutar pinchando aquí. Simplemente magistral.

OUT OF TIME – CHRIS FARLOWE: siempre en la sombra, siempre al borde del éxito, siempre en segunda o tercera fila…, a pesar de lo dicho Farlowe realizó una docena de singles bajo el sello Immediate escandalosos, la mayoría escritos por Jagger/Richards como el que le lanzó a la fama y a esta compilación, más Paint it Black, Ride on baby o I’m free; y otros de los mismísimos Small Faces, normalmente de Lane. No es un derroche de creatividad pero sus versiones o sus singles (alguno tiene propio) son una maravilla y representan la esencia del sello londinense.

WOULD YOU BELIEVE – BILLY NICHOLS: la portada hace que nuestra mente se vaya a «Pet Sounds» y el tema «Would you believe» nos teletransporta a la esencia Marriott pero el disco de Nichols tiene personalidad propia y mucha calidad. Sin volverme loco os diré que para mi es una pequeña obra maestra de la psicodélia de la época, maltratado y olvidado años y décadas más tarde sin saber exactamente porqué. Marriott aparece a la guitarra tanto en el tema que da nombre al título como en «Girl from NY». Disco de esos que vale la pena descubrir y venerar.


Un comentario

  1. Absolutamente fantástica esta entrada magisterio que nos has regalado, ignoraba mucho de lo que dices y hoy acabo el día más sabio.
    Enhorabuena por el post Niko.
    Un abrazo.

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