John Craigie nos deleita con 11 mandamientos que se mueven como pez en el agua entre géneros de la americana. Bienvenidos a la Iglesia Pagana.
A pesar de llevar más de media docena de discos de estudio, el reconocimiento de crítica y un buen puñado de directos, que al parecer es por donde mejor se mueve este cantautor/trovador californiano, no parece que la popularidad le haya llegado al bueno de John Craigie, aunque con artefactos sonoros como «Montana Tale» (09), «Apocalypse is over» (13), «Working on my farewell» (15) y «No Rain, No Rose» (17) esto debería ser ya un hecho irrefutable. De todas maneras, reconozco llegar a él a través de su buen amigo Langhorne Slim con el que ha compartido últimamente muchas batallas y conciertos.
Por suerte, durante su estancia en Portland el año pasado, se cameló a Taylor Kingman y sus The Holy Know-Nothings, quienes en 2021 firmaron uno de esos discos que te dejan totalmente en pelotas, boca abierta y culo prieto, llamado «The Incredible Heat Machine«, y una vez convencidos acabaron por arroparle en la elaboración y vestimenta de sus nuevas tonadillas que como bien dicen en la prensa especializada yanki acaban por definir a Craigie como el hijo amado de John Prine y Mitch Hedberg con un toque de trovador vagabundo countresco.
Craigie actúa de sacerdote pagano y nos conduce a rezar a su iglesia, a escuchar sus nuevos sermones siempre tan bien arropados y protegidos por TK & The Holy Know-Nothings que sin duda musicalmente ponen al disco en un pedestal, en un nivel bíblico, y que sitúan a este «Pagan Church» como el mejor disco de Craigie hasta la fecha. Un imprescindible americano de este 2024 que hará las delicias de los amantes de estos sonidos y sorprenderá a los no habituales al género.
Es escuchar la inicial «Damm my love» y saber que este artefacto nos va a encantar, y qué bien le sienta a Craigie la compañía de TK y los Holy Know-Nothings!!!! Vale, no inventa la pólvora pero te pone rápidamente en tesitura, gusta y se deja gustar, placentera y countril, pure & easy queridos….. «California Soldier» tiene algo de los «Dead», tiene un blues aletargado y fumadísimo! qué maravilla de tema! y qué bien nos conduce a «Walking Guilty» que respira New Orleans por los cuatro costados y la celestial «Where it’s from» nos arropa el alma. Preciosa.
«Vicking Sex» abre con una estupenda guitarra y un fraseo chulesco que define a la perfección esa americana de fácil conexión tan típica en estos tiempos, eso sí con «Good to you» abre un poco la paleta, más cercana a sonidos beatlesque que al puro country, hermanada con Dr Dog y melódicamente perfecta. Retoma el blues el señor Craigie con la magnífica «Judas» con la electricidad por montera y nos remata con «While I’m down» y un country pop-rockero que enamora.
La tripleta final la inicia con «Sandra» bajando revoluciones y poniéndose el traje de cantautor enamoradizo, dolor y pérdida, en definitiva: boniquismo. A «Grand Junction» ya no te la esperabas a estas alturas. Temón. In crescendo constante, esto en directo será el acabose. Y cierra este discazo Craigie de manera brillante con la ensoñadora canción que le da nombre, «Pagan Church». Un disco para escuchar, saborear y disfrutar, que será sin duda uno de los mejores del género este 2024.
01.- Damn My Love/ 02.- California Sober/ 03.- Walking Guilty/ 04.- Where It’s From/ 05.- Viking Sex/ 06.- Good To You/ 07.- Judas/ 08.- While I’m Down/ 09.- Sandra/ 10.- Grand Junction/ 11.- Pagan Church
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