Críticas Discos

…puede parecer una obra pequeña por el tono crepuscular y la sencillez que transmite, aunque realmente esconde una soberbia producción repleta de detalles que fluyen como una grabación en directo que te arropa desde el otro lado del auricular…

Es imposible llegar a todo en el momento, cosa que no quita reconocer el gran error que supuso no meter entre los elegidos de su añada ninguno de los dos discos que editó hace un par de año Big Thief, de la misma manera que lo ha sido que pasaran totalmente desapercibidos los dos discos que grabó su vocalista y líder Adrianne Lenker el año pasado. Desde luego es un grupo que se encuentra en plena ebullición en este momento pues les queman las canciones y no pueden dejarlas guardadas.
Ahora le llega el turno a Buck Meek con su segundo disco en solitario titulado Two Saviors. Fundador, guitarra y ex-marido de Adrianne para más señas, cotilleo que comento porque dicha ruptura no ha impedido que su amistad vaya mucho más allá desembocando en colaboraciones como las que se suceden aquí en algunas canciones.
Pero vamos a la miga. ¿Qué ofrece el sr.Buck Meek? Muy sencillo. Buck Meek deja para su carrera en solitario la parte más ínitma, digamos que de autor. Tonadas sencillas que te hablan en las distancias cortas, en las latitudes de folk más actual pero que hará las delicias del amante de los estilos más clásicos de la música americana. Hablamos de baladas country y de folk moderno.
Buck Meek - Two Saviors (2021)

Había poca sorpresa pues ya se conocían cuatro canciones desde hace meses. Roll Back Your Clocks es una breve y delicada canción del pasado verano cuando aún no se sabía que vendría en un disco de la calidad que se presenta. Ya con Second Sight sorprende por el plus de guitarra que aporta y unas armonías que nos llevarán a paisajes sonoros más setentas y conocidos por todos pero no menos deliciosos. A la altura de Pareidolia tenía claro que lo iba a reseñar porque se intuía que Meek no ha perdido la gracia para la melodía folkie, en este caso con teclados que enriquecen el tono acústico. Pero fue escuchar Candle co-escrita con su ex, y entender que este disco iba a ser muy especial. La pedal que conduce esta tonada me ha recordado al instante a nuestro querido Ben Keith en sus años de gloria junto a nuestro Neil Young, una primera impresión para a continuación guardar todas las distancias habidas y por haber. Y hasta le voy a perdonar que incluya Halo Light que ya había aparecido en formato sencillo hace un par de años porque es perfecta al final del disco por su tono crepuscular. 

 
Atended a la que titula el disco Two Saviors o a Dream Daughter, delicias., pop con melodías dulces muy en la línea de artistas favoritos como Clem Snide, M.Ward, Andrew Bird, a esas latitudes se acerca en Cannonball Pt.2, favorita y otra irresistible. Un disco que entre alguna tonada de mayor enjundia instrumental esconde joyas como Pocketknife, modesta, pequeña, pero que con el violín y los pequeños detalles que asoman se convierte en una pieza de orfebrería folk-pop. Ese es el territorio sonoro por el que Buck Meek acolcha sus cavilaciones sobre el sentido de la vida y el significado del amor más allá de las relaciones y las convenciones habituales, con el trasfondo del bien común y la empatía tan necesaria en estos días. 
 
Buck Meek se entrega cercano y apacible, te habla en las distancias cortas y con su timbre vocal convierte este camino mil veces transitado en el suyo propio. En apariencia Two Saviors puede parecer una obra pequeña y paralela a la banda madre por el tono crepuscular y la sencillez que transmite, aunque realmente esconde una soberbia producción repleta de detalles que fluyen como una grabación en directo que te arropa desde el otro lado del auricular, sin despegarse de su condición contemporánea y que encantará también a los más ávidos de sonidos clásicos de la americana. Una maravilla.


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