Portada del disco Every Loser de Iggy Pop

Críticas Discos

Reseña del vigésimo disco (ahí es nada) de Iggy Pop

…nos enseña sin pestañear todos los trucos de magia que se sabe de memoria. Y es que Iggy Pop encandila incluso cuando sabes que te está vendiendo la moto.

No hace falta que explique a estas alturas de la historia quien es Iggy Pop pues no quiero hacer perder el tiempo a nuestros queridos lectores que seguramente se sabrán de memoria la vida, milagros y todas las aventuras y desventuras de nuestro protagonista Stooges mediante.

Ya de entrada y con las premisas que traía Every Loser de serie, me daba un poco de pereza ponerme a escuchar. Eso de que a la batería tenemos a Chad Smith de Red Hot Chili Peppers y Duff McKagan de Guns N’ Roses al bajo, o que contiene las últimas sesiones de Taylor Hawkins, sin contar que, entre los trabajos del productor, Andrew Watt, se encuentran artistas de la calaña de Selena Gómez, Justin Bieber y Camila Cabello… buff. Mucha pereza (Y disculpen los lectores asiduos a este humilde rincón por hacerles leer estos nombres tan infames).

Eso sí, no me quedaré sin situar este disco, ya si no entre su basta discografía, como mínimo entre sus últimas obras para dilucidar hasta qué punto pueden ser reales las altas puntuaciones que ya empiezan a verse en algunos medios de postín, que nosotros amamos a Iggy Pop y no podíamos ser menos pero no a cualquier precio.

Iggy Pop, más arrugado que una pasa

Soy el tipo sin camisa que rockea, Andrew y Gold Tooth han entendido eso e hicimos un disco juntos a la antigua usanza. Los músicos son muchachos que conozco desde que eran niños, y la música os dejará boquiabiertos

Iggy Pop dixit

El mismo Iggy Pop nos descubre el pastel en estas declaraciones que leeréis en toda reseña que se precie. Traducido para el neófito (si es que existe alguno a estas alturas), se ha puesto en manos de alguien con gracia y saber hacer a los mandos lo suficientemente avispado (el mentado sr.Andrew Watt) como para aprovechar la ocasión y sacar el máximo partido a un icono de la cultura rock de todos los tiempos, ensalzando sus grandes bazas y situándolo en su salsa, dejando que simplemente sea él mismo. Y es que cuando un artista es una fuerza de la naturaleza, incluso puede hacer pasar canciones reguleras por buenas. De eso se trata Every Loser.

¿Qué encontramos en este disco? Pues tenemos un poco de todo. Digamos que Iggy y los pipiolos que le acompañan nos ofrecen en 11 canciones y menos de 40 minutos todos los registros que a lo largo de su ya extensa trayectoria nos ha ido mostrando. Entre momentos más punks y guitarreros, mainstream rockero con cierto gancho, algo de ochenterismo postrockero, alguna broma y medios tiempos donde incluso cabe el recitado. Un ejercicio de estilo, de estilo Iggy Pop.

Enérgico en canciones que me sorprenden por resultonas como Frenzy, Modern Day Rip Off y Neo Punk, su mérito tiene que hasta estos momentos más ásperos y cercanos a los añorados Stooges resulten incluso radiables (valga el anacronismo). Ok, más arrugado que una pasa, aún sabe tocar las pelotas con sus letras aunque entre sus diatribas uno puede leer entrelíneas la autoparodia o la autocrítica hacia el personaje que representa. Que ya la primera estrofa viene a decirte que tiene más cojones que tú y yo juntos, y a ver, no le voy a contradecir, pero…

Got a dick and two balls, that’s more than you all
My mind will be sick if I suffer the pricks
So shut up and love me, ‘cause fun is my buddy
All the sharks in the sea are waiting on me

Frenzy, Iggy Pop

Strung Out Johnny y New Atlantis se acercan más a mis registros favoritos y más creibles, medios tiempos new wave en las que ejerce su arte crooner en la línea de Bowie. Me encantan. Hay espacio hasta para una balada, Morning Show, una de esas tonadas que se sostienen sólo gracias a su interpretación, canción que en otras manos hubiera resultado un pastiche considerable, Iggy Pop solo con su voz puede transformar una copla, algo que hace con los ojos vendados (recuerdo el temazo Beside you de American Caesar, y lo mismo).

No es la única. Juro que he sentido miedo de que Axl Rose empezara a cantar en All The Way Down, un mainstream rock muy de L.A. que además del rugido de la Iguana, tiene el atractivo de la colaboración de Stone Gossard (Pearl Jam). Comments es un muy buen ejercicio post-rock, esta vez dando el protagonismo instrumental al bajista de Jane’s Addiction con un ritmo y teclados muy ochenteros, más que interesante. Hasta Dave Navarro anda tocando la guitarra en este disco, se lo habrán pasado bomba.

También se permite el lujo de hacer el tonto en tonadas como The News for Andy con una letra delirante digna de la leyenda que lo precede, y me agrada que no se deje llevar del todo e integre su faceta spoken word en My Animus, aunque solo sea en otro de los interludios y por solo 1 minuto. The Regency despide el pack, una buena canción con entrada en falso y en la que se le va calentando la boca in crescendo, deja buen sabor de boca, suficiente para pensar que, vale, Iggy Pop aún está presente y en buena forma.

Sin embargo y bajo mi humilde punto de vista, desde American Caesar, continúa siendo Post Pop Depression (los dos reseñados en el Exile porque sobretodo amamos a Iggy Pop) el punto más alto al que el sr.Osterberg ha llegado en estos últimos 30 años. Incluso me creo mucho más su anterior, experimental y ninguneado Free. Discos en los que intentaba exponer sus cabilaciones con cierta profundidad, incluso acercándose a la poesía y reconstruyéndose como artista con cierta consistencia lírica, o al menos más creible.

No es el caso de este disco donde, a mí modo de ver y sin ánimo de ser compartido, representa más un papel a través de unas letras exageradamente incendiarias y políticamente incorrectas, a veces de manera bastante gratuita. He de apuntar que Andrew Watt no solo produce y aporta los músicos, además aparece como co-autor de todas las canciones (lo digo por los que criticaban a Liam Gallagher por lo mismo). Eso no quiere decir que Every Loser sea un mal disco pues es muy disfrutable, es más, el grupo recrea el espíritu punk como pocos en la actualidad.

Ante todo, Iggy Pop es una obra de arte viviente en sí mismo y escucharle gritar, recitar, incluso cantar de vez en cuando y sobre todo pasarlo en grande con estos pipiolos que le arropan con acierto y respeto, pues oigan, su gracia tiene. Así que levantemos las manos de nuevo pues el atraco perpetrado ha sido perfecto y además dan ganas de verle en directo.

Y es que se mire por donde se mire, Iggy Pop ofrece cierta integridad obtenga más atención o menos, se vaya más al jazz y a la chanson o haga lo que se supone que tiene que hacer o mejor dicho, lo que la parroquia rockera espera que haga. Como es el caso de este notable Every Loser en el que nos enseña todos los trucos de magia que se sabe de memoria, haciendo honor a su leyenda sin caer, por suerte, en un producto sonrojante.

Todo en conjunto se agradece y tiene un gran valor y más en estos tiempos huérfanos de padrinos rockeros en el mainstream. Y es que Iggy Pop encandila incluso cuando sabes que te está vendiendo la moto.

Latest posts by Chals Roig (see all)


Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Artículos que te pueden interesar