Críticas Discos

Existe últimamente una tendencia peligrosa de muchas bandas hacia la coldplayzación, tendencia hacia sonidos más comerciales con sintetizadores y una sección rítmica muy ochentera, y precisamente, a mi ese sonido típico de los ochenta no es que me apasione, sonido de radiofórmula ojo, que en esa década hay discos gigantescos y muchos de mis favoritos. Desde luego nunca han sido «Mumford and Sons» un grupo de mis favoritos, tengo sus dos primeros discos, lo admito, incluso os digo que el debut «Sigh no More» del 2009 me gustó mucho, fue una sorpresa y su toque fresco y desenfadado me atrapó un tiempo pero también confieso que en este último lustro pocas veces lo he pinchado más. Su segunda aventura, «Babel» en 2012, ya me puso a prueba. De entrada rechacé el álbum y lo dejé apartado, en cuarentena. Algo había cambiado. Demasiada pose. Demasiadas lucecitas en el escenario y poca chicha, pero al final pienso que es un buen disco, un buen segundo disco que intenta mejorar al debut, sin cambiar mucho pero sí intentando abrirse a nuevos sonidos sin prostituirse demasiado, pero joder, con «Wilder Mind» a Marcus Mumford e Hijos se les ha ido la cabeza totalmente. Dónde coño están las mandolinas, los violines, el contrabajo, el banjo y el acordeón? qué mierda es esta? ya lo decía mi modbro Joserra, que a estos tipos no se los creía…. y un servidor no tenía una destrempera tan grande y tan decepcionante desde el segundo trabajo de los Kings of Leon. Y es que el grupo de Nashville de la familia Followilll entregó en 2003 un discazo de rock ultraenergético llamado «Youth and Young Manhood» pero luego, sus siguientes trabajos además de comerciales me parecen una putísima mierda. No digo que lo sean, digo que a mí me lo parecen, al menos tanto como este «Wilder Mind» de los Mumford and Sons.

No sólo es el cambio de sonido, qué también, es la participación de todo el grupo en la composición, ambas cosas contribuyen para que cualquiera pueda pensar que es otra banda, otro proyecto paralelo de Mumford, pero no, son ellos, el padre y sus hijos. La apertura con «Tompkins square park» y esa percusión enlatada con el sintetizador protagonizando la melodía ya me ponía en alerta, al loro!. Al poco de llevar un minuto ya pienso en parar el disco aunque cuento hasta cinco y lo dejo correr, la colplayización es obvia, el querer huir de su antiguo sonido también aunque en mi opinión es un error garrafal. Con todo, y escuchado el disco este primer tema es de lo mejorcito, así que si os parece una mierda mejor no sigáis escuchando porque habiendo como hay grupos como The National (perdón por meterlos aquí de esta manera…) para qué escuchar a los Mumford? Bueno, seguimos. «Believe» es el ejemplo perfecto de lo que digo, sonido Colplay con épica evangelista a lo U2, cansina como ella sola, simple y boba. como digo con esa guitarra apocalíptica a lo The Edge al final…. Me aburro. Tal vez «The Wolf» se podría decir que me gusta, bueno, no la odio al menos, con otras vestiduras, con otros ropajes, con banjos, con madolinas… pues sí… pero así, no. Y la entrada de «Wilder mind» es ya volver a ponernos las hombreras y hacernos el dobladillo del tejano al revés…. qué pedazo de mierda! A todo esto os digo que hay una docena de temas y que no voy a pasarme el día diciendo lo malos que me parecen, no puedo, no tengo ganas, no quiero perder el tiempo. La equivocación está en abandonar «su» sonido por el de otros, el de dejar a un lado lo natural por lo mecánico. «Just Smoke» tocada como antaño sería una delicia, como lo sería también «Cold arms», una lástima. Con «Wilder Mind» pasamos de la sorpresa a la incredulidad, del enfado a la indiferencia, de la emoción a la decepción. Todo muy aburrido, muy previsible, muy Colplay.

Mumford & Sons – «Wilder Mind» (2015)
3,1/10
01.-Tompkins
Square Park/ 02-.Believe/ 03-.The wolf/ 04-.Wilder mind/ 05-.Just smoke/
06-.Monster/ 07-.Snake eyes/ 08-.Broad-shouldered beasts/ 09-.Cold
arms/ 10-.Ditmas/ 11-.Only love/ 12-.Hot gates.

*post aparecido originalmente en Nikochan Island por Nikochan 


3 comentarios

  1. Vamos, lo que en jerga técnica se reconoce como una señora mierda lo de este disco para vos (y con agravante de decepción putesca, además). Y como nunca me atrapó lo de esta gente me lo pones mu fácil, claro… Come in the next one !

  2. Lo unico constante en la vida es el cambio dicen no? porque a un grupo tan talentoso cmo mumfords and son no le dejamos reinventarse y cambiar como ellos quieran? creo que lo que tendrias que centrar es el contenido del disco y si te gustan o no pero no de donde vienen ni lo que han echo antes, ellos nunca se deficnieron como un grupo folk, hicieron discos folk pero ya no, han cambiado y han madurado como hace todo el mundo.

  3. Si hacer pueden hacer lo que les venga en gana, faltaría, y a cada uno de nosotros nos puede parecer bueno o malo, en mi caso particular pienso que este disco es vulgar y que ese sonido es cansino, si quieren hacer eso perfecto, unos le compraran otros no, conmigo que no cuenten. De aquí a "Viva la vida" hay un paso.

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